BURNOUT PARENTAL: el agotamiento invisible
La importancia de visibilizar el burnout parental
FAMILIAS
4/3/20252 min read


¿Te sientes agotado como padre o madre? Podrías estar viviendo el síndrome de burnout parental
El síndrome de burnout parental es ese cansancio extremo que sienten algunos padres y madres cuando el esfuerzo de criar a sus hijos sobrepasa los recursos emocionales y físicos que tienen disponibles. En otras palabras, cuando la crianza se vuelve un desgaste constante en lugar de una experiencia enriquecedora.
¿Cómo saber si lo estás viviendo?
Algunas señales clave de este agotamiento incluyen:
Cansancio extremo: Sentirse agotado todo el tiempo, sin energía para afrontar el día a día con los hijos.
Distanciamiento emocional: Interactuar con los niños de forma mecánica, sin la conexión emocional de antes.
Sensación de ineficacia: Creer que no se está haciendo un buen trabajo como madre o padre, y perder el placer de compartir momentos con los hijos.
¿Cómo impacta en la vida diaria?
Cuando un padre o madre está emocionalmente agotado, el vínculo con los hijos puede volverse más distante. Las rutinas diarias —como ayudar con la tarea, jugar o incluso darles un abrazo— pueden sentirse como una obligación más que un momento de disfrute. Muchas veces, se entra en un “modo automático”, donde se cumplen las responsabilidades sin verdadera conexión emocional.
¿Qué puedes hacer para aliviar esta situación?
Si sientes que estás en este punto, hay estrategias que pueden ayudarte a recuperar el equilibrio:
Reorganiza las tareas en familia. Habla con tu pareja y revisen juntos cómo repartir mejor las responsabilidades del hogar y la crianza. Haz una lista de tareas y distribúyanlas de forma más equitativa.
Busca apoyo en otras personas. Conversar con otros padres y madres en la misma situación puede ser muy liberador. A veces, solo verbalizar lo que sentimos nos ayuda a encontrar soluciones más claras y menos pesadas.
Dedica tiempo para ti. No es un lujo, es una necesidad. Retoma actividades que te hagan sentir bien, como hacer ejercicio, bailar, salir con amigos o simplemente darte un respiro fuera del ambiente familiar. Agéndalo como algo tan importante como cualquier otra tarea.
Un recordatorio importante:
Nuestros hijos no necesitan padres agotados, necesitan padres felices. Si sientes que no puedes salir de esta situación por tu cuenta o el ambiente en casa se ha vuelto difícil, buscar apoyo profesional es una excelente opción. ¡No estás solo ni sola en esto!